Unravel Me

Pues, les digo algo: no sé cómo iniciar la reseña.

En el primer libro descubrimos, junto a la protagonista, que hay otras personas como ella que también tienen habilidades especiales, poderes y están escondidos del Restablecimiento. Se están preparando para atacar, y mientras Juliette tiene que aprender más sobre su letal poder, cómo controlarlo, debe al mismo tiempo lidiar con su corazón dividido entre lo que siente por Adam y Warner.

Sencillo resumen, porque en realidad no hay, no ocurre algo de gran impacto en este libro salvo descubrir cuáles de los personajes tienen poderes, qué tipo de poderes y los desvíos de la protagonista respecto a sus sentimientos.

Algo que dije, en el libro anterior y pueden ir a corroborar, es que ese primer libro no me gustó. El estilo de la autora no me termina de convencer... pero la fucking historia ME ENCANTA. En verdad. Antes dije “desvíos de la protagonista”, y eso es algo que me saca de quicio con estos libros, y es lo mucho que Juliette (o la autora) da vueltas y vueltas, y nunca llega a una reflexión directa. Eso sin mencionar que la forma en cómo escribe, el uso de las palabras que le da, es tan...

Tengo una relación amor-odio, ¿de acuerdo? De a momentos me fastidia, me obstina, me harta, y en otro me gusta y me parece poética o increíble la facilidad con la que maneja su lenguaje.

Volviendo a la trama, sí que sentí un desarrollo de personajes y llegué a conocer más a caracteres como Juliette, como Kenji, como Warner... Adam también, pero no me gusta él. No sé. Me vi un spoiler sobre Adam y me vi predispuesta a que no me gustara, así que no importa qué haga él, simplemente no va a encajar conmigo.

Un personaje que me fascinó, me hizo reír, me enamoró, fue Kenji. Este personaje es sarcástico, es hilarante, tiene un toque de egocentrismo pero al mismo tiempo es terriblemente honesto, leal y se preocupa por su gente, es justo y no teme decir lo que piensa si cree que es lo correcto. Hubo una escena en la que Kenji habla con Juliette y prácticamente le exige dejar de considerarse una víctima, deje de creer que el mundo solo gira a su alrededor y preste atención a los verdaderos problemas –que no es ella. Eso fue algo que me gustó porque, siempre nos salen con la típica protagonista que se lamenta por lo que le ocurrió, y todo gira en torno a eso, y uno solo quiere entrar al libro para contarle sus verdades justo como hizo Kenji.

Ahora, hablemos de Warner.
Odio dos cosas: ser seis años mayor y que el tipo esté encerrado en un libro. Porque AMO A ESTE HOMBRE. Es decir, sí, vemos todo desde el punto de vista de Juliette, pero esos pedacitos que nos dan sobre la personalidad de Warner, sus palabras, sus acciones, todo lo que hace, y ver que sigue igual de obsesionado por ella (aka yo de loca), me ha terminado por enamorar más aún de lo que ya estaba de él. Comparo a Warner con Adam, y este último me parece tan insípido. Warner es fuego, es pasión, es seducción y elegancia y yo simplemente me enamoré.

La relación que tiene Juliette con Adam y Warner... es tan bipolar. Es decir, estoy tan confundida como ella con respecto a sus sentimientos. Para el lector está claro que ella ama a los dos, pero yo personalmente solo quiero sacudirla y decir “¡coño, escoge a uno! Específicamente a Adam para yo quedarme a Warner”.
Está bien, no eso.
Pero, yo no soy quisquillosa con los triángulos amorosos, sin embargo este me irrita porque, por obviedad, uno de los intereses me fastidia y yo solo quiero que la protagonista se desencante y haga su elección final. Lo cual aún no pasa y me frustra.

En resumidas cuentas, el libro me gustó mucho más que el primero, lo cual significa que definitivamente voy a continuar la saga. Ya estoy ansiosa por ir a por el tercero, lo cual será pronto, muy pronto.