Este libro me enseñó más sobre escribir que todos los años de educación de mi vida (y claro, porque nunca pude ingresar a letras). Que sorpresa leer a King sobre la labor del escritor. Es sorprendente que sea tan revelador, nunca imaginé que fuera tan sencillo, tan lúcido y crítico; ahora hasta sus ideas malas me parecen divagaciones válidas y hechas a conciencia en la labor del aquel que busca sorprenderse y describir. Es bastante honesto con sus capacidades y con sus métodos y no teme contar porqué han fallado varias de sus obras. Que grato saber que alguien puede ser tan transparente sobre su trabajo. Supongo que apela mucho a lectores novatos como yo, también lo recomiendo teniendo eso en cuenta.
No sé que decir de Onetti. Sus descripciones me parecieron manjares imaginativos, y aunque requieren esfuerzo del lector (o de lo contrario te irás con las manos vacías en varios párrafos o enunciados, como algunas veces me pasó), cuando se logra esta comunión con su lectura es una experiencia reveladora pero que hiere. Onetti habla de los viejos sucios por elección, de los hombres con enfermedades obtenidas arbitrariamente, personajes de más de cincuenta años que no hicieron nada en su vida más que sentarse a fumar y ver la vida intentando hacerlos trizas, sociópatas que piensan en silencio en cabezas abiertas y heridas definitivas. Y otras cosas peores, urdidas siempre por el género masculino que el lector tendrá que enfrentar. Me pareció un ejercicio difícil de empatía y casi nunca se logró. No sé si recomendaría esta lectura. Al terminar el libro sentí un pequeño alivio. Pero supongo que la lectura no siempre me traerá satisfacción. Pero eso no significa que me haya parecido una mala lectura. Lo imagino como ver las cosas con los ojos del diablo. Algo así.
La novela más perfecta que leído. Nunca me imaginé tan inmerso en la vida de los monjes franciscanos, intrigado por un crimen extraño y simbólico en medio de una abadía misteriosa que contiene una biblioteca prohibida. Una ambientación muy poderosa y culta sobre la época medieval. Sentí demasiadas cosas. Habla del fascismo, de la intelectualidad y la sabiduría, de la sobreorganización de aquellos que creen custodiar el saber, de la extrañeza de la religión, del lenguaje y los simbolismos y de cómo afectan nuestra historia. Un libro inmenso que crece más entre más lo piensas. Estoy muy impresionado y conmovido. Estos libros son inmortales.
No sé cómo explicarlo, pero eso fue hermoso, profundo y extraño a la vez. La delicadeza y el tiempo que toma para desarrollar la revelación final, es un trabajo tan minucioso y oculto que, las páginas finales, llegaron tan inevitables y dolorosas que preferí no leerlo en un lugar público. Así de poderoso. Es lento (lo siento, pero para mí no descalifica este adjetivo en el arte, hay veces que suma mucho) y atmosférico; te lleva con paciencia por un camino insospechado. A pesar de que parece escueto y lacónico con sus descripciones, me vi a mi mismo aportando mucho a la imagen que el escritor apenas se encarga de perfilar con maestría. Hace rato no leía algo que me obsequiara la deliciosa tarea de imaginar más por deleite que por la inseguridad narrativa de la novela (que no es nada despreciable, es algo humano).
Me pareció genial sentirme inmerso también en la niebla que flotaba por el aire de aquel país legendario, obligado al olvido.
785 Books
See all