La mayor parte de lo que está escrito y que no forma parte de los relatos, se encuentra hecho con inteligencia artificial. El cambio en el tono, y como está compuesto el texto lo delata en segundos.
La cantidad de veces que se repiten las patologías sociales y culturales es abismal, hablando de lo mismo una y otra vez.
Más allá de eso, los relatos son viscerales y bastante explícitos. Bien escogidos. 2 estrellas por eso.