

Encontré El señor de Sabbath por casualidad, y terminó siendo exactamente lo que me gusta en cuanto a contextos: una historia que aborda lo sobrenatural, el shamanismo y la brujería. Además, descubrir que la pareja principal es homosexual fue una grata sorpresa que le dio todavía más valor a la lectura. Desde el inicio me atrapó bastante y no me costó engancharme con la trama.
Si bien no diría que la escritura de Mariana Palova es la mejor del mundo, porque en varios momentos la sentí bastante sencilla, eso mismo hace que el libro sea fácil de leer y disfrutar. No es una historia que exija pensar demasiado, sino más bien dejarse llevar y sumergirse en el viaje.
Lo que más me impresionó fue cómo maneja su universo. Me encantó la manera en que logra enlazar brujería, esoterismo, cambiaformas y referencias culturales diversas para dar forma a un mundo coherente, rico y fascinante. Las entidades y descripciones se sienten naturales dentro de la historia y crean una ambientación envolvente.
Encontré El señor de Sabbath por casualidad, y terminó siendo exactamente lo que me gusta en cuanto a contextos: una historia que aborda lo sobrenatural, el shamanismo y la brujería. Además, descubrir que la pareja principal es homosexual fue una grata sorpresa que le dio todavía más valor a la lectura. Desde el inicio me atrapó bastante y no me costó engancharme con la trama.
Si bien no diría que la escritura de Mariana Palova es la mejor del mundo, porque en varios momentos la sentí bastante sencilla, eso mismo hace que el libro sea fácil de leer y disfrutar. No es una historia que exija pensar demasiado, sino más bien dejarse llevar y sumergirse en el viaje.
Lo que más me impresionó fue cómo maneja su universo. Me encantó la manera en que logra enlazar brujería, esoterismo, cambiaformas y referencias culturales diversas para dar forma a un mundo coherente, rico y fascinante. Las entidades y descripciones se sienten naturales dentro de la historia y crean una ambientación envolvente.