Throne of Glass

Debo decir que, aunque intenté leer “Una Corte De Rosas Y Espinas” y no logré conectar con él, sí que he conectado con la historia de Adarlan.

Sabía que Sarah J. Maas escribe bien y que el hecho de no haber conectado con otros de sus libros no debería impedirme darle una nueva oportunidad a la autora. Y así lo hice...

Debo reconocer que al principio pensé que, dado que la autora se adentra en la trama sin explicar quiénes son sus personajes o por qué se encuentran donde están, su forma de narrar cada uno de los acontecimientos que ocurren es impecable. Cada uno de sus personajes sorprende, y su trama young-adult hace que el lector quiera seguir leyendo.

Hablemos de su protagonista: Celaena Sardothien. Es una chica que, a pesar de haber estado esclavizada en las minas de Endovier durante un año, mantiene la arrogancia que caracteriza su pasado como asesina. La asesina más mortífera de Adarlan. Me parece maravilloso ver a una protagonista con ese pasado tan oscuro, que lucha por obtener su libertad, aunque esto la lleve a volver a matar. Increíble.

Luego está Dorian Havillard, el heredero del trono de Adarlan, quien es el crush de muchas lectoras, me incluyo. Él decide proponer a Celaena como campeona del rey y, por supuesto, tiene un romance con ella.

Chaol Westfall, jefe de la guardia real y mejor amigo de Dorian, es uno de los personajes que menos me gusta. Se ve claramente lo que siente por la protagonista, pero la trata como si no lo hiciera.

Entre el resto de personajes, destaco a Nehemia, la princesa de uno de los reinos no conquistados por Adarlan. Visita el castillo supuestamente para aprender el idioma y las costumbres, pero lo que realmente quiere es ayudar a los rebeldes de su tierra a vencer al rey de Adarlan. La princesa se hace muy amiga de Celaena y, juntas, descubren el mal que asola el castillo: Caín, que cumple bien su papel como antagonista de la historia, queriendo arrebatarle a la protagonista su victoria en el campeonato.

No puedo irme sin mencionar al Duque Perrington, patrocinador de Caín en el torneo, que hace todo lo posible para que este lo gane, sin importarle matar a la joven protagonista y engañar a quien sea con tal de conseguir su objetivo. El rey de Adarlan, amigo del duque, esconde un gran secreto que no se revela ni siquiera al final del libro.

En conclusión, “Trono de Cristal” es un buen inicio de saga que deja un buen sabor de boca para continuar leyendo.